El pasado 2 de mayo fue el Día Internacional del Acoso Escolar. Este mal de nuestros días afecta a muchas más personas de las que podríamos imaginar. Un 9,4% de los estudiantes de primaria confiesa haber sido víctima de acoso escolar durante 2020. Y no ha sido una cosa puntual: en más de dos ocasiones al mes han sido víctimas, según los datos de Macmillan Education.
Según la percepción de los propios alumnos, el curso más castigado por esta problemática es tercero de primaria. En él, un 13% de estudiantes ha sufrido alguna vez acoso en su centro educativo, seguidos por cuarto de primaria, con un 11%, y segundo con un 10%. En cambio, en los cursos de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), se percibe un descenso llegando a entre el 2% y el 3% de los alumnos que han sufrido bullying.
Con ello, teniendo en cuenta datos globales, el 3% confiesa sentirse solo en su centro escolar y el 2% manifiesta haber sufrido cyberbullying en más de dos ocasiones.
Insultos y motes, el acoso mñas habitual
Según los datos de la Fundación ANAR y Mutua Madrileña, el 35,5% de los alumnos son conscientes de la existencia de casos de acoso. Además, un 38,5% asegura que afecta a más de un compañero de clase. De acuerdo con estas entidades, los insultos o motes son el tipo de agresión más habitual, un 76,1% en primaria y un 80,6% en secundaria. Le siguen los empujones, collejas y escupitajos y golpes y patadas.
“A pesar de la pandemia, que ha limitado las clases presenciales durante todo 2020, el acoso escolar sigue siendo un problema persistente en el sistema educativo español”, explica Raquel Pastor, responsable del programa KiVa en Macmillan Education.
KiVa, el programa finlandés de prevención del acoso escolar
Para minimizar el número de casos de acoso escolar en las aulas españolas, Macmillan Education trabaja con el programa de prevención del acoso escolar KiVa. Desarrollado en la Universidad de Turku, Finlandia, persigue educar y sensibilizar a toda la comunidad educativa de alumnos, familias y docentes sobre el acoso escolar (verbal, físico, ciberbullying …) dando herramientas para detectarlos de manera temprana.
El programa ha sido evaluado en un ensayo realizado a 30.000 alumnos y los resultados reflejan que el 98% de las víctimas sintieron que su situación había mejorado. Este programa se encuentra ya implementado en el 90% de las escuelas finlandesas. Además, ya está presente en países como Suiza, Holanda, Reino Unido, Alemania, Francia, Bélgica, Italia, Suecia o Luxemburgo.
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