Diez consejos para pasar de becario a empleado

0
empleo juvenil becario

En estos días de verano muchos han sido los jóvenes que han probado el mercado laboral como becario con prácticas en diferentes empresas. Suelen ser puestos de duración limitada y pocas posibilidades de promoción. Sin embargo, seguramente el objetivo de muchos es tratar de conservar ese empleo el mayor tiempo posible.

“No es imposible. Las empresas anhelan el talento. Dependen de él. Por eso están encantadas de encontrar personas que encajen con su filosofía, que aporten trabajo y soluciones. No dudemos de que ellas son las primeras interesadas en contratar con carácter indefinido a aquellos becarios con los que colaboran”, asegura Rolf Bax, portavoz de CVapp.es.

Lo principal en estos contratos de prácticas o de becario es hacer un buen trabajo, integrarse perfectamente con los compañeros y ser útiles a la empresa. Aunque pueda parecer obvio, tener iniciativa y generosidad (anteponer las necesidades del colectivo a las propias) son algunas de las aptitudes blandas o soft skills que distinguen a un buen empleado y que todo jefe, temporal o permanente valorará.

Decálogo de características

La plataforma europea para la creación de currículos online CVapp.es ha elaborado un decálogo con las características que suelen tener el becario que finalmente es contratado:

1. Mostramos muchas ganas de aprender

Debemos ser ‘esponjas’ y estar decididos a aprovechar esa oportunidad.

2. Queremos trabajar y lo demostramos

Somos activos y nuestra predisposición es absoluta. Es algo que deberían compartir todos los trabajadores, pero en estos casos es aún más importante.

3. Somos resilientes y positivos

Miramos de frente los problemas, nos enfrentamos a ellos y reaccionamos con determinación y optimismo.

4. Tenemos expectativas razonables

Nadie nace aprendiendo, mucho menos un recién graduado o licenciado en cualquier materia. La humildad y la naturalidad son necesarias.

5. Participamos y aportamos

La timidez o la apatía no tienen cabida en esta etapa. Siempre que nos dejen, debemos colaborar: no solo nos ayudará a aprender mucho más, también nos permitirá mostrar todo lo que podemos hacer por la organización.

6. Perseguimos metas

Nos desenvolvemos con proactividad y nos fijamos objetivos personales atractivos. Además, por supuesto, nos enfocarnos hacia los objetivos colectivos.

7. Estamos disponibles y favorablemente predispuestos para todo

Nos olvidamos de las exigencias y abrazamos con ánimo cualquier oportunidad que se nos presenta.

8. Actuamos con naturalidad

Nos mostramos como somos, con ganas de aportar y de aprender, con todas nuestras potencialidades.

9. Preguntamos si dudamos

Hemos de tener confianza y enterarnos bien de todo siempre. Si no es posible, solicitamos las aclaraciones oportunas con delicadeza y sentido común.

10. Somos puntuales

Es una falta de respeto, a la empresa y a los compañeros, no hacerlo. Además, demuestra ausencia de compromiso y de interés.

Image Credits: Shutterstock.com